1

Alejandro Rozado, El moscovita y las redes sociales

El librero

Ramón Cuéllar Márquez

 

 

La Paz, Baja California Sur (BCS). Para muchos las redes sociales han significado una manera de informarse, contrastar, exponer y deliberar sobre temas nacionales, en especial por la defensa de la Cuarta Transformación de la vida pública de México. Así hemos descubierto y seguido a nuevas personas con quienes coincidimos no solo por afectos, que también, sino por la lucidez de su pensamiento y la firmeza de sus convicciones. Uno de ellos es Alejandro Rozado (CDMX, 1954), quien ha sido un faro de luz ante los acontecimientos históricos que estamos viviendo. Cuando digo históricos me refiero a que la Historia —así, con mayúscula— la estamos presenciando frente a nuestros ojos en primera fila, a todo color, y lo mejor, podemos participar, interactuar, opinar, inferir, pensar y compartir los sucesos cotidianos que poco a poco se convierten en hechos para la posteridad.

Y este hallazgo de cruzarnos con gente a la que comenzamos a seguir por su luz le da sentido a muchos que no solo coinciden por empatía sino porque sus palabras adquieren la capacidad de construir nuevos discursos, nuevas maneras de decir el mundo, y dentro de él, nuevas realidades. La vieja realidad del neoliberalismo está sucumbiendo, pero su cuerpo agónico se resiste a morir porque paga para que alguien encuentre el elixir de la eterna juventud —un candidato conservador— que los deje volver y ya no tengan que pagar con su propio dinero —prefieren el cómodo erario al que pueden explotar ad infinitum—, la máscara de oxígeno que los mantiene entre la vida y la muerte política —que no económica, esa se ajusta la mayor parte de las veces a las circunstancias cuando mira que perderá más de lo que gana siendo oposición.

También te podría interesar: No somos más que un vulgar homolocuens

A Alejandro Rozado lo podemos hallar en el Facebook siendo puntual, acertado y claro con respecto al pensamiento de principios que trata de prevalecer la justicia social y el bien común. Es hijo del exilio español en México, del ala republicana que luchó en la Guerra Civil Española (1936-1939); nació en la colonia Condesa y estudió en el Colegio Madrid, posteriormente ingresó a la carrera de Física en la UNAM —que abandonaría después—, adhiriéndose asimismo al Partido Comunista Mexicano, que era una organización de carácter ilegal durante los setenta. Sin embargo, pronto habría de dedicarse de lleno a la actividad política desde esa trinchera en la zona industrial de Ecatepec entre trabajadores y gente con profunda marginación social, esos desclasados por las elites políticas y económicas de México. Encarcelado, torturado y perseguido por sus ideas fortaleció sus ideales, que hoy podemos constatar no solo el discurso sino desde sus acciones. Alumno de Enrique Semo (Bulgaria, 1930), investigador sobre la idea de la Historia en el poeta Octavio Paz (CDMX, 1914-1998), Rozado ha logrado definir con mucho sus principios desde la izquierda. Ya asentado, después de los tiempos de la “guerra sucia” de los setenta, cursó la maestría en psicoterapia sistémica, dedicándose de tiempo completo a la psicoterapia.

Es fundamentalmente un hombre de palabras, un escritor aferrado a esas palabras, que está demás decir son letales y persiguen que podamos ver ahí donde somos ciegos porque nos falta informarnos o bien interesarnos. Como las palabras tienen vida propia, toman su propio camino, construyen nuevos discursos y nuevas personas se arman con nuevas palabras. Alejandro Rozado publicó una novela, podemos decir que una crónica de vida, sus memorias, donde nos expone el desarrollo de esa pasión por hacer del verbo una acción que alimente a sus lectores. Se trata del libro El moscovita (CECA, 2020, en primera edición; Barker-Jules, en segunda edición; también digital en Amazon), una fuente personal de donde se puede abrevar y comprender ideológicamente lo que ha pasado en México desde la izquierda durante los últimos cincuenta años.

El moscovita es un libro de pasiones por la vida, reconstruida a partir de la visión de quien la ha vivido con intensidad. Retoma sus ideales a partir de sus propios pasos, a los que no ha traicionado sino que al contrario los ha reivindicado con creces, muy diferente a quienes en el pasado fueron guerrilleros o de una izquierda dura —me vienen a la cabeza Jesús Zambrano (Sonora, 1953) y Roger Bartra (CDMX, 1942), por supuesto—, pero que hoy militan en la derecha más recalcitrante de México. Es una novela escrita minuciosamente, cargada de un lenguaje abierto, directo, que pretende narrarnos hechos de un tiempo que para algunos no existe o que para otros tiene sus claroscuros. La agilidad del relato se vuelve trepidante capítulo por capítulo, los diálogos reconstruidos nos retratan la cotidianeidad del narrador, interesado en dejar un testimonio político que solo tendría efecto en los tiempos que estamos viviendo, es decir, la suma de todos los movimientos sociales que le dan sentido a la realidad actual.

De este modo, vislumbramos que las obras poseen detrás de sí una estructura nacida de quien ha vivido vigorosamente heredándonos la oportunidad de prevalecer a través de las palabras en este tiempo moderno, que poco a poco se abre paso para una historia escrita por todos.

—–

AVISO: CULCO BCS no se hace responsable de las opiniones de los colaboradores, ésto es responsabilidad de cada autor; confiamos en sus argumentos y el tratamiento de la información, sin embargo, no necesariamente coinciden con los puntos de vista de esta revista digital.




Crímenes por homofobia en Loreto. 5 Años de impunidad

FOTOS: Modesto Peralta Delgado.

El Beso de la Mujer Araña

Por Modesto Peralta Delgado

 

La Paz, Baja California Sur (BCS). La noche del 19 de junio de 2017, Manuel Salvador Arce Campos —conocido como Gino— parecía no haber llegado a pasar la noche a su casa. Vivía con sus padres, en la colonia El Jaral, en Loreto. Miriam Arce, su hermana, recibió una llamada de su madre llorando, al día siguiente, muy temprano: Tu hermano no vino a dormir porque no vi el carro. La primera contestó que iría a checar al trabajo y regresaría a ver qué había pasado con él, pues, en efecto, no contestaba al celular desde las primeras horas del día 20. Cuando regresó a la casa de sus papás, fue a la habitación de Gino por el control remoto para apagar el aire acondicionado, suponiendo que éste no estaba allí, pero justo allí lo encontró: estaba debajo de la cama, descalzo, sin vida, con huellas de golpes en el cuerpo y la cara.

A 5 años de los presuntos crímenes por homofobia en Loreto, BCS, sin que haya aún un detenido por estos hechos, María Miriam Arce Campos, de 48 años, hermana de una de las víctimas, accedió a dar una entrevista a CULCO BCS para contar su versión de un homicidio y el camino que siguió, infructuosamente, para hacer justicia. Hay que recordar que, según la noticia publicada en SDP Noticias por Carlos Ibarra en 2017, la muerte de Manuel Salvador era la cuarta de un modus operandi en la que, al parecer, un mismo sujeto habría asesinado a otros gays de ese puerto: Tito Amador Rubio y Prisciliano Fuerte Fernández, cuyos cadáveres fueron encontrados el 20 y el 24 de enero de ese año,  respectivamente, y José Trejo, en febrero.

También te podría interesar: ¡Adiós, Luis Fernando!

El cuarto crimen

Manuel Salvador Arce Campos tenía 47 años, era Director de Atención Ciudadana en el Ayuntamiento de Loreto bajo la administración panista que encabezó Arely Arce Peralta. Gino era muy amigable, muy sociable, salía bastante y tenía muchos amigos. Era muy conocido en Loreto, cuenta su hermana, quien también trabaja en el Gobierno Municipal, en el área de Servicios Públicos.

El presunto homicidio habría ocurrido entre la 1 y 2 de la madrugada del 20 de junio de 2017, pues la víctima había tenido comunicación con su otra hermana pasada la medianoche del día 19. Según Miriam, la madre escuchó algunos ruidos, pero no se lo tomó con alarma; jamás les pasó por la mente que ocurriría un hecho violento en esa casa donde vivían padre, madre, la hermana menor y el hoy occiso.

Lo que sí alarmó a la madre de la víctima era que hasta muy noche no veía, como de costumbre, el Nissan Sentra 2000, color dorado, de su hijo, sin saber, obviamente, que había sido robado por el agresor. El carro lo encontraron al día siguiente a unas dos cuadras de la vivienda del sospechoso: un joven que se había dejado ver en el cajero de Bancomer de Loreto, con Manuel Salvador, la noche de su muerte.

Según otros testimonios anónimos que este medio recabó en Loreto, todo indica que el joven atraía a algunos homosexuales y los estrangulaba, para robarles después. Para quien esto escribe ha sido muy difícil encontrar personas dispuestas a relatar estos hechos; incluso, hubo un quinto intento en el que un joven logró escapar con vida, este medio lo contactó pero él se negó a dar una entrevista. Sin embargo, es curioso que en Loreto mucha gente reconoce plenamente al sospechoso, quien se veía andar libremente por las calles. Fue interrogado por la Policía Ministerial. No pasó nada. Miriam: Tuvo el descaro de ir al DIF, porque ahí trabaja su mamá, y no le hicieron nada. 

En el caso de Gino, La conclusión fue que lo mató un muchacho —cuenta Miriam— No sé quién es, en aquel tiempo era menor de edad. A su hermana le sorprende que el hoy occiso era muy fuerte, pero al ser estrangulado, es probable que lo hayan agarrado a traición. Además del vehículo, el presunto homicida se había llevado una laptop y un iPad que, según la entrevistada, le encontraron en sus propias manos los policías ministeriales y no se los regresaron a la familia de la víctima.

Injusticia inexplicable

El cuerpo de Manuel Salvador fue encontrado el 20 de junio de 2017 a las 7:00 horas, aproximadamente, por su hermana. Llegó la Ministerial y el médico legista, a quien Miriam le preguntó de qué había muerto: De un infarto, dijo éste, Discúlpeme pero no murió de un infarto, a mi hermano lo mataron. Finalmente, en el acta le pusieron muerte por estrangulación. El mismo día me tomaron como cinco declaraciones, me pidieron facturas de los celulares y no hicieron nada (…) Nada, ni siquiera una orden de aprehensión y todo lo señala a él. Nunca me dieron una respuesta y hasta la fecha.

La Policía Ministerial de Loreto dio con el presunto homicida, lo tuvieron enfrente, le llegaron a quitar celulares y otros objetos robados, sin embargo, nunca fue detenido. Que porque era menor de edad, supone Miriam, pues, parecía que entonces tenía 17 años y cumpliría la mayoría de edad un par de meses después; de oídas, también, ha escuchado que el presunto culpable va y viene a Sinaloa.

Al preguntarle si hubo alguna declaración o acción de parte de la alcaldesa Arce Peralta, dijo que era Como si nunca hubiera ocurrido nada. Comentó que estos crímenes por homofobia levantaron comentarios de los habitantes de Loreto, sin embargo, nunca se realizó ninguna marcha o manifestación pública. De hecho, no hubo mucho seguimiento de estos sucesos por parte de la prensa local. En 2017, en los medios sudcalifornianos destacaba una oleada de ejecuciones por el crimen organizado, especialmente al Sur de la entidad.

La carpeta quedó abierta, no se le dio seguimiento. Mi hijo me dijo que tenía que ir yo para preguntar a la Ministerial, parece que se fueron a archivos, no sé como se les llama, pero no les dan seguimiento. A 5 años de que el presunto homicida no ha sido llevado a la justicia por estos crímenes, Miriam denota falta de esperanza en las autoridades: Una se enfada por las leyes que tenemos; fueron puras vueltas.

El rojo del arcoíris

En 2019, Alejandro Brito publicó Violencia extrema. Los asesinatos de las personas LGBTTT en México: los saldos del sexenio (2013-2018), en el cual contabilizó un total de 473 personas de la comunidad LBGT+ asesinadas en todo el país en dicho periodo. Baja California Sur aparece con un total de 6 muertes de este tipo, en el mismo lapso de tiempo, sin embargo, la insuficiente cobertura sobre temas de la diversidad sexual en la media península, más la falta de denuncias, hace imposible saber con exactitud cuántos crímenes han podido ocurrir en ese y otros sexenios.

Por otra parte, Xóchithl Rangel Romero publicó en 2018 el artículo Crímenes de odio por homofobia: La necesidad de su regulación como tipo penal autónomo en México, donde argumenta que en México ya hay elementos para que las autoridades suscriban los crímenes de odio por homofobia. Dice “Es necesaria la creación del tipo penal bajo una figura autónoma […] que, al ser visto como un tipo penal autónomo, su fuerza jurídica de creación sea más precisa que solo colocar una agravante al tipo penal de homicidio”.

__

AVISO: CULCO BCS no se hace responsable de las opiniones de los colaboradores, esto es responsabilidad de cada autor; confiamos en sus argumentos y el tratamiento de la información, sin embargo, no necesariamente coinciden con los puntos de vista de esta revista digital.




Los químicos y los alimentos

FOTOS: Internet

La inmortalidad del cangrejo

Por Lorena Durán Riveroll

 

 

La Paz, Baja California Sur (BCS). Cuando daba los cursos de Química I y II en bachillerato, una pregunta recurrente en el primer día de clase era: ¿A mí para qué me sirve saber química si quiero estudiar (y aquí puede ir casi cualquier carrera: diseño, arquitectura, contabilidad, administración, turismo y un enorme etcétera)?. La respuesta, una y otra vez, era: ¡saber química sirve para la vida!

Tener conocimiento fundamental de química puede evitar que seamos engañados por vendedores de productos milagro, así como caer en lo que se conoce como quimiofobia, que es el temor hacia los químicos. Este temor es cada vez más común; la mercadotecnia y un cúmulo de personas mal informadas, pero con mucha iniciativa y una conexión a internet, han popularizado el miedo hacia las sustancias que en el imaginario popular son toxinas o venenos. Pero ¿Qué es una toxina? ¿Qué es un veneno? Y más importante, ¿Qué es un químico?

También te podría interesar: El (aburrido) lenguaje de los científicos

Toxinas, venenos y químicos (y químicas)

Empecemos por las toxinas. Aunque está muy de moda decir que todo es tóxico, esto no tiene mucho que ver con la realidad. Las toxinas son sustancias producidas por algunos organismos que resultan nocivas para otros porque se unen a proteínas en algunas células. Esto hace que esas células no puedan realizar las acciones necesarias para la vida normal.

Por ejemplo, la tetrodotoxina, producida en la piel y el hígado de algunos peces globo, se une a unas proteínas de las neuronas y células musculares. Al hacerlo, impide la transmisión de señales para que los músculos puedan generar movimiento, y entre los músculos afectados están los que facilitan la respiración. Esta situación produce rápidamente la muerte por parálisis respiratoria. Esta es la toxina presente en el famoso platillo japonés fugu. Para preparar un fugu correctamente, los chefs se entrenan por muchos años y aprenden a poner en las láminas del filete solo una cantidad pequeñísima de toxina, que toman apenas rozando con el cuchillo el hígado del pescado. Quienes lo han consumido dicen que se sienten flotar y cosquilleos por todo el cuerpo. Sin embargo, si durante la preparación se agrega un miligramo de toxina, algo así como la mitad de la cabeza de un alfiler, el resultado puede ser la muerte en pocos minutos.

Los venenos, por otro lado, son sustancias también producidas por organismos, pero en este caso, se fabrican en glándulas específicas y con fines específicos. Por ejemplo, las arañas, los alacranes y algunas serpientes producen veneno para cazar a sus presas. No son toxinas porque el veneno se produce con el fin de hacer daño o matar. La toxina resulta ser tóxica más bien de manera accidental.

También existen toxinas y venenos que no son producidos por organismos. Una sustancia se considera tóxica cuando hace daño al organismo de manera no intencional. Los venenos se producen siempre con el fin de envenenar.

Finalmente, los químicos. Un químico, como una química, son hombres y mujeres que han estudiado la carrera de química. La confusión se ha dado por una mala traducción del inglés de la palabra chemical. En ese idioma sí existe la diferencia sencilla entre chemical – sustancia química –, y chemist – persona que ha estudiado la carrera de química. Entonces, cuando hablamos de chemicals, la traducción correcta es sustancias químicas, ya que, de otra manera, se puede cometer una injusticia con las personas que nos hemos dedicado al estudio de la química cuando dicen, por ejemplo, elimina a los químicos de tu vida.

La maldad de las sustancias químicas

Una vez que hemos establecido que hablaremos sobre sustancias químicas y no sobre químicos, surge la pregunta: ¿son malas las sustancias químicas? La respuesta es sí y no. Y es así porque absolutamente todo lo que nos rodea es sustancia química. Nosotros mismos somos sustancias químicas: proteínas, grasas, azúcares, vitaminas, minerales, o sea, átomos. Todo lo que podemos ver, tocar, sentir u oler, son sustancias químicas porque todo está formado por átomos. En ese aspecto, los venenos son sustancias químicas, tanto como la fruta fresca que comemos por la mañana.

Ahora hablemos de los alimentos. No hay alimentos sin sustancias químicas, porque todos los alimentos son eso, sustancias químicas. Son, como toda la materia, una serie de átomos que se unen en moléculas que se unen para formar compuestos. Lo mismo la lechuga que los caramelos. Lo mismo un pepino que una lata de tomates.

El peligro en los alimentos

A lo largo de la historia humana, el mayor peligro de los alimentos ha sido su consumo cuando están en malas condiciones. Un alimento en mal estado contiene una elevada cantidad de bacterias; muchas de ellas producen toxinas y pueden causar infecciones intestinales graves e incluso la muerte. De hecho, hasta hace un par de siglos, la muerte por infecciones e intoxicaciones alimentarias era algo muchísimo más común que ahora.

¿Y cómo podemos deshacernos de las bacterias en los alimentos? Una opción es darles un tratamiento térmico. Pero si el alimento ya está putrefacto, aunque matemos a las bacterias con el calor, las toxinas producidas permanecen y nos pueden enfermar. Lo mejor es evitar que proliferen las bacterias y los hongos en los alimentos. Pero ¿cómo?

Antes de tener acceso a sistemas de refrigeración o congelación, o a conservadores artificiales, algunos métodos como el secado al sol o el salado fueron de enorme ayuda. Tanto así, que estos métodos se siguen utilizando, de manera que encontramos la deliciosa carne seca, el bacalao tan navideño y la exquisita cecina, por ejemplo. Sin embargo, ahora existen una serie de procesos, como el enlatado y el liofilizado, y sustancias como el benzoato de sodio, que pueden aumentar la seguridad y la vida de anaquel de muchos alimentos.

Desde que se empezaron a utilizar procesos y sustancias para proteger a los alimentos de la putrefacción, la esperanza de vida humana ha aumentado significativamente. Por supuesto que este aumento se debe a una serie de factores y no solo a los procesos de conservación de alimentos, pero, sin duda, estos han tenido mucho que ver.

Sin embargo, también es cierto que se han asociado ciertos riesgos al uso de algunos conservadores y procesos, incluyendo procesos tradicionales, como el asado o el ahumado. Y aunque vivimos en una época en la que los alimentos son más seguros que jamás en la historia, siempre surgen nuevos riesgos asociados a estos, así como a las maneras de cocinarlos y conservarlos.

Si bien los alimentos enlatados, en conserva, salados o congelados son una excelente opción para algunas ocasiones y para disminuir el desperdicio al aumentar la vida de anaquel, tampoco debemos consumir únicamente alimentos conservados y procesados. No, no son alimentos tóxicos; no contienen toxinas. No obstante, aunque los procesos para la producción de alimentos tienen muchos mecanismos de seguridad alimentaria, durante estos procesos se les agregan sal y/o azúcares en cantidades excesivas para potenciar el sabor. Y el riesgo proviene, esencialmente, de estos excesos. También pueden contener altas cantidades de grasas saturadas y perder algunas vitaminas solubles en agua. Los excesos de algunos nutrientes y las pérdidas de otros podrían implicar un riesgo para la salud si únicamente se consumen alimentos procesados.

La dosis hace al veneno

Theophrastus Phillippus Aureolus Bombastus von Hohenheim, quien se autonombró Paracelso (¡y qué bueno!) fue un médico suizo de finales del siglo XV, y es considerado el primer toxicólogo. Él fue el primero en entender y explicar cómo ciertas sustancias pueden ser curativas en dosis bajas y letales en dosis altas. A él se atribuye la frase dosis sola facit venenum, “la dosis hace al veneno”. Y sabemos que es cierto porque, en altas dosis, cualquier cosa que nos digan que es buena, puede causar la muerte.

¿Alguna vez has escuchado que el agua potable es tóxica? Bueno, no lo es. No, al menos en las dosis que consumimos comúnmente. Pero en el 2007, en un (absurdo) concurso en California, una mujer de 28 años murió por intoxicación hídrica. Jennifer Strange participó en un concurso que consistía en beber mucha agua y no orinar, a cambio de ganar un Nintendo Wii. Poco después de terminar, sintió un dolor de cabeza y se retiró a su casa, donde un poco más tarde, fue hallada muerta. Esta historia triste confirma que cualquier exceso puede ser mortal.

En la actualidad, existen un sinnúmero de vendedores de vitaminas, suplementos con proteínas vegetales o animales y, recientemente, los nuevos llamados superalimentos. Estamos bombardeados de información, por un lado, sobre las míticas toxinas en algunos alimentos y lo milagroso de otros. Pero, al final, todo es un truco publicitario. El secreto de una alimentación adecuada consiste en no caer en los excesos, cosa difícil, sobre todo con el azúcar, las grasas y la sal. Una dieta equilibrada debe basarse principalmente en alimentos frescos, sin embargo, consumir alimentos conservados no es un problema, siempre que no sean la base cotidiana de la dieta ni se consuman en exceso.

Dicho de otra manera, en realidad nada es inofensivo. Cualquier cosa puede ser, potencialmente, un veneno. El secreto está en la dosis.

Gracias, como siempre a mis lectores de prueba: Esteban y Fernando Sánchez y la participación especial del Dr. Eduardo Fócil Némiga. Muchísimas gracias por sus comentarios para mejorar este texto.

Páginas de consulta:

https://verificiencia.com/

https://www.bbc.com/mundo/noticias-44854542

https://revistas.ecosur.mx/ecofronteras/index.php/eco/article/view/1836/1827

__

AVISO: CULCO BCS no se hace responsable de las opiniones de los colaboradores, esto es responsabilidad de cada autor; confiamos en sus argumentos y el tratamiento de la información, sin embargo, no necesariamente coinciden con los puntos de vista de esta revista digital.




Querido papá

FOTO: Cortesía

Especial Día del Padre

 

Mención honorífica del concurso “Carta al Padre” 2022

Por Laura Adelina Fernández Gómez

 

Querido papá:

Estas palabras no salen de mi pluma ni de mis pensamientos, salen de mi corazón agradecido. Naciste un año antes que terminara la segunda guerra mundial, nuestro país en vías de desarrollo, la mayoría de las comunidades sin agua potable, drenaje, energía eléctrica ni carreteras pavimentadas, solo caminos de terracería, herradura y brechas. Sin servicios de salud, ni de vivienda popular, un país con muchas necesidades para la sociedad, no había colonias, había barrios, como los barrios son una hermandad donde todos se ayudan todos cooperan y se protegen, las alegrías y las tristezas también eran compartidas. Así creciste tú, ese fue tu código de honor, la hermandad, siempre ayudando a quien necesitaba o compartiendo las tristezas para hacerlas más llevaderas. Vi como no solo eres la figura paterna para nosotros tus hijos, sino para mis primos también, los primos grandes, los canosos, que venían a la sombra de tu naranjo aquí en Fovissste, para escuchar tu consejo o compartir las lágrimas de la pérdida de sus amadas esposas.

¿Te acuerdas cuando nos robaron el carro? Que al día siguiente lo recuperamos en la procuraduría, los agentes nos dijeron que había sido robado por unos muchachos, que todos escaparon excepto uno, y que ese estaba en barandillas, pediste hablar con él, los agentes creyendo que lo reprimirías o insultarías te dejaron hablar con él, te vi a lo lejos hablando en un banca de la procuraduría con un muchacho desconocido, cabizbajo, roto, con las manos esposadas, y a ti, hablando serenamente como siempre, pasaron unos minutos y regresaste solicitando el indulto, los agentes no lo podían creer (ni el muchacho tampoco), trataron de hacernos tedioso el trámite pero lo llevaste a cabo.

Nos diste una lección de humanidad que no se encuentran en los templos, perdona a tu prójimo, pon la otra mejilla, ama a tu prójimo como a ti mismo, tú, tan Guadalupano y amoroso humano como siempre. Nosotros, tus hijos fúricos, no podíamos perdonar a quien intentó despojarnos de lo nuestro, pasaron los días y unas personas de aspecto extraño tocaron a nuestra puerta, tú como el protector, saliste a atenderlos, era la familia de aquel muchacho, la mamá, la abuela, los hermanitos y el mismo muchacho, con una bandeja llena de empanaditas de cajeta, agradeciéndote la madre menciona entre lágrimas que el indulto que les diste significaba otra oportunidad de vida, te contó un poco de ellos, donde el padre del pretenso a ladrón, los había abandonado cuando él era un niño, y que siempre le faltó esa figura paternal, que agradecía a los cielos la plática que le diste mientras estaba esposado, aceptaste las empanadas, les deseaste bien y regresaste a la sala, veías la televisión mientras degustabas las empanadas rellenas de gratitud, sin hacer espaviento de la gratitud recibida, humildemente aceptaste y les deseaste bien, yo siendo una adolescente no comprendía bien lo que sucedido, lo que sí pude comprender es que tengo tanto padre que hasta me sobra para compartir.

Papá como no te voy a querer si fuiste el mejor proveedor de nuestro hogar en aquellas devaluaciones de nuestro país de 1982 y más dura la de 1994, cuando el Gobierno Federal entregaba una tarjeta para comprar un kilogramo de tortillas por un peso y no sobraba un peso para comprarlas (hasta teníamos que juntar centavos para completarlo). Entonces buscaste un trabajo extra para poder solventar las necesidades, en esa época te miraba irte temprano antes de las ocho de la mañana, salir a las tres de la tarde, llegar a comer, platicar con mamá, descansar un rato a las cuatro con treinta minutos ya estabas en camino para La Normal Superior, regresabas después de las diez de la noche a casa para cenar y platicar de nuevo con mamá. Recuerdo cuando regresabas de largas jornadas de trabajo en San Lucas, escuchaba tu carro rugir desde la esquina, salíamos mi hermano y yo a recibirte, ni bien te bajabas cuando ya estábamos prendidos de tus piernas, papito había regresado a casa, siempre con un chocolatito para nosotros, en épocas donde no había centavos para tortillas, los chocolates tenían tres veces su sabor.

Nunca te vi cansado, enojado, molesto o renegar por la situación económica del país, siempre te vi responsable, trabajador, mi ejemplo a seguir, dignificando el trabajo, y disfrutando al máximo el tiempo con la familia, cuando venías cansado del trabajo de campo, ese trabajo que implicaba recorrer muchos kilómetros supervisando, aun con el cansancio que tu trabajo significaba, siempre tuviste tiempo para cargar el carro de nuevo y llevarnos a la playa, aunque solo compartiéramos sandias con limón y sal, no notaba en ese tiempo que había carencias económicas en todo el país, pues tú siempre nos diste experiencias para que el hambre y el frio no nos nublara la infancia, gracias papito, por todos esos bellos recuerdos, llenos de sal, limón y arena.

Tu paso por el magisterio mexicano es amplio, nutrido y profundo, tu huella esta en donde has laborado, maestro de maestros, tu sencillez siempre busco dignificar a los maestros distinguidos de Sudcalifornia, tramitando en varias escuelas para que llevaran sus nombres, siempre preocupado de rendir tributo al magisterio, y no buscando el propio, así de humilde eres, y eso te hace grande.

A pesar de tus constantes capacitaciones y nivel de estudios, te vi descargando libros, llevando y trayendo material de construcción para las nuevas escuelas, a veces llegabas lleno de sudor y con los zapatos sucios, siempre en pie de lucha para mejorar las situaciones de las escuelas rurales.
En 1997 tuvimos la pérdida de mi abuelita Adela y mi mamita, ambas, tu mamá y tu esposa nos dejaron el mismo año, por primera vez te vi llorar en silencio, abrazar los vestidos de mi madre que aún conservaban su perfume, hacer una oración una plegaria y volverlos a guardar en el ropero. Para ti papá, no hubo tiempo para estar triste, había que sacar adelante a 5 hijos que había perdido a su madre. Fuiste nuestro papá y mamá, asumiste todas las responsabilidades que mi madre había dejado, los desayunos que nos hacías en la secundaria, los recuerdo con mucho cariño, o como nos despertabas para que no llegáramos tarde a la escuela. Lo hiciste muy bien papito, estamos eternamente agradecidos, cuando más la extrañábamos estuviste tú, con tu corazón lleno de amor y tristeza, nos arropaste para no perder la unión que mamá nos daba.

Papá, sírvase esta carta para expresarte mi admiración por tu trayectoria profesional, fuiste maestro rural, director, supervisor y jefe de sector de educación primaria, jefe del departamento de escuelas rurales, jefe de educación audiovisual, jefe de materiales didácticos y culturales de la SEP en Baja California Sur, jefe de extensión cultural y relaciones públicas de la Normal Superior, aun así siempre tuviste tiempo de jugar con nosotros, ponernos la hamaca, reparar el fregadero del baño o hacernos los disfraces que necesitábamos para nuestras presentaciones escolares. Siempre tuviste tiempo para todo, para el trabajo y para nosotros, tu ejemplo es nuestra mayor guía para con nuestros propios hijos, hoy que ya eres abuelito, tus ocho nietos son la extensión de tu grandeza.

Gracias papito por las idas a la playa, por los cuentos que nos leías, por despertarnos en las mañanas nubladas, por soportar nuestra adolescencia, gracias por los desayunos, por laborar doble turno, gracias por tu cansancio, por tu amor, por tu grandeza, gracias por ser padre para muchos, gracias por las escuelas que fundaste, las aulas que construiste, las fotografías que tomaste, gracias también por los regaños y reprimendas, pues no tolerabas la holgazanería ni la maldad, gracias por darnos tanto amor ayer, hoy y siempre, gracias por ocupar el lugar de mamá cuando faltó, por escucharnos aunque nuestros temas de conversación te parecía raros y extraños, siempre tenías tiempo de preguntarnos -¿Cómo te fue hoy?-, ahora yo te pregunto padre mío, viejito de mi corazón ¿Cómo te ha ido hoy? Cuéntame todas las historias que quieras, estoy aquí para escucharte, pon el café, yo llevo las galletas roncadoras.

Te Amo Papá.

Atte. La Güereja

Dedicada a Mario Guadalupe Fernández Caro




Violencia contra las mujeres, enfoque integral

Ius et ratio

Arturo Rubio Ruiz

 

 

 

La Paz, Baja California Sur (BCS). En la normatividad relacionada con la violencia, encontramos diferentes concepciones, distinguiendo la violencia según el nexo entre víctima y victimario, derivado de la vinculación familiar, afectiva, laboral, educativa, formativa, entre otras, pero en todas las variantes definidas legalmente, el común denominador es el género femenino como grupo mayoritario en todas las modalidades de violencia que tienen registro legal.

La violencia contra las mujeres se caracteriza por su invisibilidad, al ser eventos considerados socialmente como del ámbito privado, es generalizada la percepción de que las autoridades, no deben inmiscuirse. Esto propicia la normalización de la violencia. La prevalencia de la figura patriarcal autoriza al varón a ejercer la violencia, garantizando su impunidad, ya que al ser entendida como algo natural o privado, no es denunciado y mucho menos sancionado.

También te podría interesar: Ciudadanía digital. Marco legal

FOTO: Internet

Atendiendo al común denominador, la estrategia integral en la lucha contra la violencia, deberá atacar en particular a la problemática específica que genera la violencia contra la mujer, principalmente en espacios de interacción social y/o familiar en que se manifiestan relaciones asimétricas entre hombres y mujeres, que resultan incubadoras naturales de discriminación, alimentada por prejuicios atávicos y patrones de conducta que no se restringen al seno familiar o al hogar, pues abarcan prácticamente todos los ámbitos de la actividad social.

En México, la violencia contra las mujeres representa un problema histórico en el cual la discriminación, la desigualdad y los actos cotidianos que se cometen contra ellas, conforma un común denominador, dentro de las ecuaciones de los distintos niveles sociales, que es preciso conocer, reconocer, prevenir, atender, combatir, sancionar, proscribir y erradicar.

La Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares, del INEGI, permite dimensionar la problemática de las mujeres de 15 años y más, proporcionando información respecto del tipo de violencia que sufren (emocional, económica, física, patrimonial y sexual), en la relación de la pareja y en los ámbitos escolar, laboral, comunitario y familiar, nos muestra la cruda realidad de la situación:

En el país residen 46.5 millones de mujeres de 15 años y más. El 57.1% de las mujeres se encuentran casadas o unidas, un 24.6% están solteras y el 18.3% restante, separadas, divorciadas o viudas.

El 43.9% de las mujeres fueron agredidas por su pareja en algún momento de su relación.

En el país, el 66.1% de las mujeres de 15 años y más (30.7 millones), han padecido al menos un incidente de violencia en sus vidas. El 49% sufrió violencia emocional, 29% violencia económica, patrimonial o discriminación, 34% física y 41.3% sexual en los distintos ámbitos:

ÁMBITO DE PAREJA Y FAMILIAR. En promedio, el 10.3% fue víctima de violencia por parte de algún integrante de su familia, sin considerar al esposo o pareja. Los agresores más señalados: los hermanos, el padre y la madre. La violencia se ha ejercido principalmente en la casa y en la casa de algún familiar. Los agresores sexuales, preponderantemente, son tíos y primos de la víctima.

ÁMBITO COMUNITARIO. El 38.7% de las mujeres fueron víctimas de actos de violencia por parte de desconocidos. El 34.3% sufrió violencia sexual (intimidación, acoso, abuso o violación). Las agresiones ocurrieron principalmente en la calle y parques (65.3%), autobús y microbús (13.2%) y en el metro (6.5%).

ÁMBITO LABORAL. El 26.6% de las mujeres que trabajan o trabajaron alguna vez, experimentaron violencia, principalmente de tipo sexual y de discriminación por razones de género o por embarazo. Los agresores más frecuentes son los compañeros de trabajo (35.2%) y el patrón o jefe (19.3%).

ÁMBITO ESCOLAR. El 25.3% enfrentaron violencia por parte de compañeros (47.1%), compañeras (16.6%) y maestros (11%). En promedio, el 10.7% de las mujeres que asistieron a la escuela, fueron agredidas sexualmente. La violencia en este ámbito ocurre en un 74.3% dentro de las instalaciones de la escuela.

CIFRA NEGRA. El 88.4% de las mujeres que experimentaron violencia física o sexual por otro agresor distinto a la pareja, no solicitó apoyo a alguna institución, ni presentó queja o denuncia ante alguna autoridad.

__

 

AVISO: CULCO BCS no se hace responsable de las opiniones de los colaboradores, esto es responsabilidad de cada autor; confiamos en sus argumentos y el tratamiento de la información, sin embargo, no necesariamente coinciden con los puntos de vista de esta revista digital.