1

La leyenda de El Santo, el Enmascarado de Plata

Fotos: Internet

California Mítica

Por Gilberto Manuel Ortega Avilés

 

La Paz, Baja California Sur (BCS). Un referente obligado en varios aspectos de la cultura mexicana es El enmascarado de plata. Fue un referente deportivo siendo estos sus campeonatos y logros: Consejo mundial de lucha libre, Campeonato mexicano de peso pesado ligero CMLL, Campeonato mexicano de peso medio CMLL (4 veces), Campeonato mexicano de parejas CMLL (2 veces) – con Rayo de Jalisco- , Campeonato mexicano de peso welter (2 veces), NWA World Welterweight Championship (2 veces), NWA World Middleweight Championship (4 veces), WWE Hall of Fame (2018).

Al convertirse en un héroe deportivo, tuvo la oferta de realizar películas lo que lo catapultó a la fama más allá del ring, grabando más de 50 películas: Santo contra cerebro del mal (Cerebro del Mal) (1958) (coproducción con Cuba), Santo contra los hombres infernales (Cargamento blanco) (1958) (coproducción con Cuba), Santo contra los zombis (1961), Santo contra el Rey del Crimen (1961), Santo en el hotel de la muerte (1961), Santo contra el cerebro diabólico (1961), Santo contra las mujeres vampiro (1962), Santo en el museo de cera (1963), Santo vs. el estrangulador (1963), Santo contra el espectro (El espectro del estrangulador) (1963), Blue Demon contra el poder satánico (El poder satánico) (1964) (actuación especial), El hacha diabólica (1964), Atacan las brujas (1964), Profanadores de tumbas (Los traficantes de la muerte) (1965), El barón Brákola [tres episodios] (1965), Santo, el Enmascarado de Plata vs. la invasión de los marcianos (1966), Santo, el Enmascarado de Plata vs. los villanos del ring (1966), Operación 67 (1966), El tesoro de Moctezuma (1966), Santo en el tesoro de Drácula (El tesoro de Drácula) y su versión sin censura El vampiro y el sexo (1968), Santo contra Capulina (1968), Santo contra Blue Demon en la Atlántida (1969), Santo y Blue Demon contra los monstruos (1969), El mundo de los muertos (1969) caracterizando a: Caballero enmascarado de plata/Santo, Santo vs. los cazadores de cabezas (1969), entre muchas más.

También te puede interesar: El OVNI que grabó Francisco King para el canal 10

¿Dónde nace la rivalidad de Blue Demon y El Santo?

Aunque aparecieran en películas juntos, siempre existió una rivalidad entre los más grandes ídolos del ring en México, ¿pero donde inicia todo?

En 1952, El Santo desenmascara al ídolo de muchos y maestro de Demon, el problema se dio porque al contrario de esperar a que de manera casi de ritual, y parte importante de la tradición luchística, al momento que black shadow pretendía quitarse la máscara, El Santo pretende quitársela él mismo, siendo esto un claro insulto y una violación de las reglas no escritas de la lucha libre, fue ahí donde demon golpea en medio de todos a El Santo, y, por esta humillación, se crea una rivalidad eterna.

Todos los monitos de lucha son El Santo

No existe niño mexicano que no haya tenido un ring con luchadores “pirata” o bootleg como ahora se le llaman, curiosamente los primeros que salieron fueron El Santo y Blue Demon, ya posteriormente agregando a los luchadores de moda, pero el primer y único molde que se sigue usando, es el de El Santo y lo podemos ver en los detalles de la máscara, siendo los demás – como blue demon–  solo pintados con las formas y colores de otros luchadores; también la forma en que están parados, es la típica pose de lucha de estos ídolos.

En sus últimas entrevistas, El Santo declaró que nunca supo porque gustaban sus películas donde peleaba con vampiros, zombis o marcianos, las consideraba malas, aunque tenían mucho éxito, en México le prohibieron seguir grabando películas de lucha libre, y fue a grabar a Haití la película de Magia Negra y El Santo contra el Dr. Muerte.

Le ofrecían cargo de político, pero no le interesaba, incluso cuando se le cuestionaba que su popularidad en el cine estaba a la baja, él decía que lo que realmente le interesaba era la lucha libre.

Mucha gente quería conocer su rostro, la leyenda urbana contaba que el día que revelara su identidad iba a morir, y así sucedió, después de enseñar su rostro en televisión murió.

Tal era su leyenda que, en su apogeo, los turistas al llegar a México y ver que El Santo realmente existía, se sorprendía porque pensaban que solo era una figura de ficción del cine.

Como dato curioso, existe una película turca no oficial, donde El Santo y el capitán América se enfrentan a un malvado hombre araña, y esto es solo una pequeña muestra de las miles de referencias y menciones que encontramos alrededor de la cultura mundial del legendario “El Santo, el Enmascarado de Plata

__

AVISO: CULCO BCS no se hace responsable de las opiniones de los colaboradores, esto es responsabilidad de cada autor; confiamos en sus argumentos y el tratamiento de la información, sin embargo, no necesariamente coinciden con los puntos de vista de esta revista digital.




Alicia y el ajedrez de las maravillas. Filosofía de las matemáticas en el ajedrez

FOTO: Internet

La demencia de Atenea

Por Mario Jaime

Están jugando un partido de ajedrez,
el mundo entero es un gran tablero
Alicia a través del espejo

 

La Paz, Baja California Sur (BCS). Interpretar, decodificar, hacer hermenéutica, juzgar o hablar sobre las obras de Lewis Carroll que incorporan espejos, tiempo, naipes, flamencos, espacio, hongos, conejos blancos y reinas decapitadoras; es prácticamente infinito. Psiquiatras, políticos, académicos, filólogos, poetas, matemáticos, diletantes, sociólogos y, por supuesto, ajedrecistas han intentado explicar el universo de Alicia.

El primer conflicto surge en el seudónimo, Charles Dogson y Lewis Carroll no parecen la misma persona. Dogson fue un profesor, religioso y matemático brillante, flemático, apegado a la razón. Lewis Carroll fue un poeta.

También te podría interesar: El tiburón boreal

Acusado de pedofilia por sus extemporáneos, debido a su afición por retratar niñas semidesnudas, este diácono de Oxford ha sido calumniado y alabado por igual. Se le ha acusado por  enviar cartas de amor a Alice Lidell, su musa de 11 años.

Richard Wallace propuso en 1996 que Dogson fue  Jack el destripador. Algunos psicoanalistas modernos le utilizan como blanco de sus pervertidas conclusiones pseudocientíficas. Para otros, fue un santo, un misántropo virgen que sólo se sentía a gusto en la compañía de criaturas tan inocentes como él.

65 años antes de que Godel enunciara su principio de incompletitud que pondría coto a la pretensión de que las matemáticas eran verdaderas, Lewis Carroll ya lo había anticipado en el libro que le dedicó a Alicia. Como profesor de lógica, una de sus obsesiones era contestar la pregunta sobre si es la locura la que nos hace pensar que todo es lógico o es la lógica la que nos lleva a la locura.

Alicia y su mitología creciente, se ha desarrollado como una alegórica bola de nieve. Al carecer de sentido, las múltiples interpretaciones son casi tantas como lectores haya. Para unos la tesis principal es el sinsentido de un mundo férreamente lógico, para otros una crítica a la época victoriana, incluso a la propia reina. Unos se inclinan por una anticipación profética a la teoría de la relatividad; otros por un criptograma a decodificar; al igual que  Wallace pensó, anagramas que dejaba como pistas de sus asesinatos hipotéticos. Para Borges era una pesadilla perfecta, por aquello del espejo y el laberinto; para Bergson, comedia pura.

En A través del espejo y lo que Alicia allí encontró, el poeta plantea una metáfora ajedrecística o quizá un problema por su forma de ser enunciado. Destaca como ajedrez féerico y, en efecto, todo el libro se puede leer sobre esta base. Alicia es un peón blanco  que se coronará y ganará el juego a las piezas rojas. Antes de comenzar la historia, aparece el siguiente diagrama.

El peón blanco (Alicia) juega y gana en  11 movimientos

El autor explicó su problema en el  prefacio de 1896.

Como el problema de ajedrez ha intrigado a algunos de mis lectores, debo explicar que está bien estructurado, al menos en cuanto a movimientos se refiere. Todo lo más, cabría señalar que la alternancia de jugadas entre “blancas” y “rojas” no se produce tan regularmente como cabría desear y que cuando hablo de “enrocar” me refiero al hecho de que, tanto las reinas como Alicia, han entrado en el palacio. Pero todo lo demás —el “jaque” al Rey Blanco en la sexta jugada, la muerte del Caballo Rojo en la séptima y el “jaque mate” al Rey Rojo— se ajusta con fidelidad a las reglas del juego, como puede comprobarlo todo aquel que se tome la molestia de realizar dichas jugadas sobre el tablero.

Diversas hipótesis se han desarrollado para resolver el problema.

El matemático Martin Gardner denunció lo absurdo del problema subrayando dos inconsistencias.

  • Las blancas juegan muchas veces más que las rojas sin alternar sus movimientos. Las rojas sólo realizan 3 jugadas. Las blancas 13, de las cuales 8 son consecutivas.
  • Cuando la Reina Roja se acerca a Alicia —que ya a estas alturas es Reina coronada—pone en jaque al Rey Blanco sin que la otra Reina se percate ni la defienda.

Otra interesante característica que hace del problema el clásico ajedrez de las hadas, es el enroque de reinas. Carroll lo justifica como una entrada a sus casas. Enrocar es un verbo que describe el desplazamiento simultáneo de dos piezas. En este caso, semánticamente es correcta la noción de enroque, aunque etimológicamente no, pues enroque proviene de Roque, palabra que antiguamente designaba a la torre, del árabe Rokh o Rujj. Es por eso que el enroque se refiere al movimiento del rey y una de las torres. En inglés, se escribe to castle refiriéndose a lo mismo. Por lo tanto, las reinas y Alicia entran al castillo, se “enrocan” o sea they castle in.

John Fisher cuenta en su libro The magic of Lewis Carroll, la investigación del reverendo Ivor Davies que buceó en la biblioteca del poeta. Davies sugirió que Carroll no violaba las reglas sin que hubiese una trampa, una coartada o un mensaje escondido. El escritor se aficionaba a las cartas cifradas. Había que leerlas de abajo hacia arriba y de derecha a izquierda, pues la inversión afectaba al orden de las palabras pero no a su significado. Entre los libros que Davies encontró en la biblioteca estaban dos manuales del gran Howard Staunton y The art of Chess play de Walker. En uno de los libros de Staunton se puede leer que en su remoto periodo de nacimiento, el ajedrez fue un juego basado en el azar. El turno de las jugadas se decidía echando los dados. Tal vez en este azar radique la clave por qué las blancas tuviesen prioridad en la extravagante partida.

Taylor la interpretó como un símbolo antagónico entre el ala conservadora contra el ala radical de la Iglesia anglicana en Oxford. El autor nota que la dogmática Reina Roja siempre se sitúa espacialmente a la derecha de Alicia, mientras que la insegura Reina Blanca, se sitúa a la izquierda de la niña.

Algunos explicaron la posición como una alegoría política, la situación de las alianzas entre estados que dio origen a la Primera Guerra Mundial.

Hay interpretaciones aún más fantásticas. En su libro “Alice et le maître d’échecs” el ajedrecista Chistophe Leroy defiende la tesis de que el problema de ajedrez que plantea Carroll es en realidad una carta en clave en donde Carroll pide la mano de Alice Liddell. La batalla entre las rojas y las blancas es un símbolo amoroso, las blancas serían el amor puro mientras que las rojas representarían el amor pasional. Leroy también apuntala que el número 42 es la clave fetiche para entender al matemático.

En “Alicia en el país de las maravillas” hay 42 ilustraciones de John Teniell, además en el juicio contra Alicia el rey dice que el Artículo más antiguo del tribunal es el Artículo 42 que ordena a toda persona mayor de un kilómetro de altura abandonar la sala.

En el problema de ajedrez que nos ocupa, siempre según Leroy, al sumar los valores clásicos de las piezas que hay en el tablero después del enroque de las dos reinas obtenemos lo mismo.

3 reinas equivalen a:                                                              30 puntos

1 torre equivale a:                                                                    5 puntos

2 caballos equivalen a:                                                            6 puntos

La pequeña Alicia como peón equivale a:                               1 punto

________

Volia!                                                                          42 puntos

El juego se presenta en dos columnas de 10 y 11 semi movimientos (2 x (10+11) = 42).

El problema contiene 14 movimientos de las blancas y 3 movimientos de las piezas rojas (3 x 14 = 42).

Leroy alega que el personaje del caballero rojo es en realidad el autor en la forma de Lewis Carroll mientras que el caballero blanco es el autor en la forma de Charles Dogson y cuando este se encuentra con Alicia ya fuera del tablero, esto significa el fin de la relación niña adulto entre los dos. En esta jugada es justo cuando la suma de todas las piezas da como resultado 42.

Sobre los simbolismos en las letras escondidas y el movimiento de las piezas, el autor encuentra que:

El peón es Alicia. Los caballeros se mueven en forma de L (como el caballo) hacia ella. Y esa L es la “L” de Lewis, Love y Liddell. El caballero rojo hace jaque para capturar al peón Alicia.

El rey blanco sería el padre de Alicia, la reina blanca la madre mientras que la reina roja es la mismísima reina Victoria. La torre blanca sería la torre de Londres, metáfora de la censura sexual de la época victoriana, de la represión sexual del autor ante una sociedad que no puede comprender su amor por esa niña. Mientras que el rey rojo… ¿quién es el rey rojo?

Semejante numerología sería un alarde demencial sino es porque el mismo Carroll era un brillante matemático que jugaba con enigmas. ¿Lo resolvió Leroy?

¿Y si todo fue y es realidad? Dogson fue Carroll, un pervertido y santo pedófilo inocente, que escondía pistas en un complicado juego numerológico, un obseso de la semiótica más intrincada, un diácono tartamudo que rajaba prostitutas en Whitechapel, un autor rico, un hombre que le propuso matrimonio a su musa por medio de un problema de ajedrez fantástico.

O lo contrario.

Carroll le respondió a un amigo norteamericano que le preguntaba sobre el significado de su poema “La caza del Snark”:

Mucho me temo que no quise decir nada más que cosas sin sentido. Aun así, tú sabes, las palabras significan más de lo que nosotros deseamos expresar con ellas cuando las usamos; por lo que todo un libro podría significar mucho más de lo que supone el escritor. Así que, sean cual sean los significados que estén en el libro. Me alegra aceptarlos como el significado del mismo.

A final de cuentas, estamos en el país de las maravillas. [1]

 

 

[1] Para un excelente estudio sobre el ajedrez en la obra de Carroll recomiendo:

Carroll, Lewis; Alicia a Través del Espejo (Prólogo por Jaime de Ojeda); 1996; Alianza Editorial S.A.; Madrid.

El libro de Leroy lo puede consultar en línea:

Leroy Christophe;  Alice et le maître d’échecs, 2008. URDLA, Hudle.

 

__

AVISO: CULCO BCS no se hace responsable de las opiniones de los colaboradores, esto es responsabilidad de cada autor; confiamos en sus argumentos y el tratamiento de la información, sin embargo, no necesariamente coinciden con los puntos de vista de esta revista digital.

 




La fecha de fundación de la Misión de La Paz. Un enigma a desentrañar

FOTOS: Internet

Tierra Incógnita

Por Sealtiel Enciso Pérez

 

La Paz, Baja California Sur (BCS). En nuestra tierra californiana, la influencia del periodo jesuita fue definitiva para la consolidación del dominio de la Corona Española y la entrada de la cultura de esta nación en nuestras tierras. Sólo la fe inquebrantable y la obstinación propia de los misioneros de la Compañía pudieron ser rivales contra la aridez de nuestra península y la hostilidad de sus lugareños. Poco a poco, a partir de 1697, se fueron internando los misioneros en las entrañas de la California milenaria y fundando las famosas misiones, por medio de las cuales se planeaba la conversión de los californios en la religión que ellos ostentaban así como el cambio de toda su forma de vida.

Sin embargo, no siempre fue tarea fácil el poder datar con exactitud la fecha en la que se fueron fundando estos enclaves misionales, como ahora lo vamos a poder conocer en el caso que nos ocupa, que es el enigma de la fecha de fundación de la Misión de Nuestra Señora del Pilar de La Paz.

También te podría interesar: Ignacio Alejandro del Río Chávez. Un historiador de intachable honestidad intelectual

Sin lugar a dudas, todos los historiadores de la California han tenido que remitirse a los textos que nos han heredado los misioneros jesuitas para poder tener una referencia de los diferentes sucesos que se dieron durante los 70 años que permanecieron en esta península (1697- 1768). Afortunadamente, existen repositorios en nuestro país en donde se han concentrado una gran cantidad de informes que rendían de forma constante y permanente los ignacianos a sus jerarquías dentro de la Compañía.  Estos repositorios son el Archivo General de la Nación, Fondo Antiguo de la Biblioteca Franciscana, Fondo Franciscano y la Biblioteca Pública del Estado de Jalisco, etcétera. También a nivel internacional se cuenta con el Archivo General de Indias (Sevilla, España), Fondo Jesuita (Roma, Italia), y la Biblioteca Bancroft en Berkeley, California, entre otras.

Antes de continuar con este derrotero en la búsqueda de la fecha exacta del establecimiento de la Misión de La Paz, es importante contextualizar al lector. Para definir la fundación de una misión, se llevaba a cabo todo un proceso que involucraba presupuestos, personal que se destinaría para su funcionamiento e incluso hasta el nombre que llevaría el mencionado establecimiento. Como bien sabemos, los jesuitas concertaron una autorización virreinal con el  marqués José Sarmiento y Valladares para poder trasladarse a la California e iniciar la conversión de los naturales. La mencionada autorización no fue fácil de conseguir, pero dado que los Ignacianos se ofrecieron a realizar esta conquista espiritual sin pedir un solo quinto a la Corona Española, esto fue lo que inclinó el fiel de la balanza a su favor. Sin embargo, este ofrecimiento representó, durante todo el tiempo que permanecieron en la California, un gran reto ya que tenían que ingeniárselas para conseguir el dinero suficiente para sostener a las misiones. Desde un principio esto lo consiguieron solicitando “donaciones” a las caritativas almas piadosas entre los ciudadanos más ricos de la Nueva España. No sin grandes dificultades pudieron poco a poco conseguir el dinero suficiente para iniciar y expandir su odisea en las Californias.

Una vez que se contaba con el dinero que garantizara el sostenimiento de una misión, se planeaba cuidadosamente el lugar en el que se iba a establecer procurando que fuera una ranchería muy poblada, con abundante agua y tierra para practicar la agricultura, aunque fuera de forma modesta. Posteriormente, se definía a qué sacerdote le correspondería el alto honor de realizar el recorrido hacia el paraje seleccionado y construir los incipientes edificios (templo, barracas, plaza de armas, almacenes, vivienda para el sacerdote y los soldados, etctérea) que darían pie a este nuevo enclave misional. Finalmente, se acordaba la fecha de partida, las personas que acompañarían al sacerdote en su travesía así como la mejor ruta para llegar al lugar marcado. Casi siempre los sitios seleccionados ya eran conocidos con antelación (dos o tres años anteriores), pero se esperaba hasta tener el suficiente sostenimiento económico y el personal necesario para iniciar la fundación de estos centros, lo anterior garantizaba que su permanencia en el tiempo fuera exitosa.

En el sitio del puerto de La Paz, ya este lugar había sido explorado desde el año de 1533 con la fallida y desastrosa expedición de Fortún Jiménez, dos años después arriba al lugar Hernán Cortés, el cual por casi 12 meses estuvo porfiando el lograr establecerse de forma permanente pero al final tuvo que retirarse sin haberlo logrado. En el año de 1683 también se había intentado fundar una nueva misión, la cual llevaría el nombre de Nuestra Señora de Guadalupe de las Californias, y a pesar de que durante dos meses una fuerza comandada en lo militar por Isidro Atondo y Antillón, y en lo espiritual por Eusebio Francisco Kino, permanecieron en el sitio, tuvieron que abandonarla abruptamente. En el año de 1716, el sacerdote Juan María de Salvatierra había organizado una expedición por la “Nación Guaycura” buscando un paso para llegar al puerto de La Paz y fundar una Misión, pero el carácter belicoso de los Californios de ese sitio se lo impidió.

Fue hasta el primer día del mes de noviembre de 1720 que los sacerdotes Jaime Bravo y Juan de Ugarte, a bordo de la balandra “El Triunfo de la Santa Cruz”, deciden emprender el establecimiento definitivo de una Misión en el puerto de La Paz. A ellos se les sumaría diez días después el sacerdote Clemente Guillén, el cual por tierra realizaría la travesía para encontrar a sus hermanos de Orden.

En estas fechas de salida de la expedición coinciden todos los historiadores, los cuales como ya mencioné, se han basado en los escritos que heredaron los misioneros jesuitas, tanto los tres que participaron, como sus hermanos ignacianos que estuvieron enterados de esta aventura. Sin embargo las discrepancias sobre la fecha de fundación de la misión ha sido motivo de diferencias, las cuales expondré a continuación.

El historiador y profesor Pablo L. Martínez, en su libro Historia de la Baja California menciona lo siguiente sobre este particular: La misión de La Paz fue fundada el 4 de noviembre de 1720, si por fecha de la fundación debe tomarse el día de la llegada de los fundadores, los PP. Ugarte y Bravo, quienes habían salido de Loreto en la balandra “El Triunfo de la Cruz” el día 1º. del referido mes de noviembre. Escogido el lugar apropiado “en una loma alta que domina las playas, a tiro de escopeta corta de aguaje, y de suelo duro y llano, con una mesa muy espaciosa”, se dio principio al desmonte, el cual estuvo terminado en cuatro días. En otro de sus libros titulado Efemérides Californianas: 1533-1933, nuestro autor reafirma esta misma fecha como el aniversario de fundación de la Misión de La Paz. Como podemos apreciar, Martínez es categórico en la fecha de la fundación, sin embargo, tengo que hacer la siguiente consideración: casi ninguna de las misiones que se fundaron en la California toma como el día de este importante acto cuando arriban a un sitio. Según tengo entendido, la única Misión fundada el mismo día de la llegada a un lugar fue la misión establecida por E. F. Kino en el puerto de La Paz en 1683. Por lo general, el primer día de la llegada, los colonos se dedicaban a descansar, a reconocer el sitio para escoger el mejor lugar para construir la iglesia, las barracas, almacenes e incluso establos para los animales que les acompañaban. El desmontar el terreno y levantar todos estos inmuebles, por más frágiles y sencillos que fueran, les llevaba varios días, así que declarar el día de la llegada de la expedición a un paraje como el día de la fundación de la misión era un excepción rarísima.

Otro de los doctos investigadores que expresó la fecha de la fundación de la Misión de La Paz fue el Dr. Michael W. Mathes, el cual en su libro Las Misiones de Baja California  1683 – 1849 dice lo siguiente: La Bahía de La Paz, descubierta por Femando Cortés en 1535 y nombrada como tal por Sebastián Vizcaíno en 1596, fue explorada por el Almirante Isidro de Atondo y Antillón en 1683 y el Padre Juan María de Salvatierra en 1716, ambos en busca de un sitio apropiado para una misión. El sitio de la Misión Nuestra Señora del Pilar de La Paz fue escogido por los Padres Juan de Ugarte y Jaime Bravo el 13 de Noviembre de 1720, quienes habían salido de la Misión Nuestra Señora de Loreto, doscientos treinta y tres kilómetros al norte, abordo de El Triunfo de la Cruz. Dotada por el Marqués de Villapuente, la misión fue fundada el 3 de diciembre por los Padres Ugarte y Bravo, y tres días después la llegada del Padre Clemente Guillén contribuyó al éxito de la fundación. Aunque muy dependiente del servicio de El Triunfo de la Cruz para abastecerse, la Misión se extendió para incorporar las visitas de San Blas, Angel de la Guarda y San Hilario. Aquí podemos darnos cuenta de la discrepancia tan grande, de casi un mes, entre la fecha establecida por Pablo L. Martínez y el Dr. Mathes, sin embargo hay elementos de peso, que en breve describiré, para que el Dr. William Michael concluyera esta fecha de diciembre.

También el historiador y cartógrafo Carlos Lazcano Sahagún, en un artículo publicado en el diario El Vigía y titulado Misiones de las Californias X: Nuestra Señora del Pilar de La Paz Airipí expresó lo siguiente sobre esta importante fecha: El 13 de noviembre de 1720, los padres Juan de Ugarte y Jaime Bravo salieron en barco de Loreto hacia la bahía de La Paz con el fin de hacer un nuevo intento por establecer una misión la bahía. La navegación la hicieron en “El Triunfo de la Cruz”, el primer barco construido en California.  Así, gracias al patrocinio del Marqués de Villapuente y a la mejor disposición de los guaycura, el 3 de diciembre de dicho año, los padres Bravo y Ugarte pudieron fundar la misión de Nuestra Señora de la Paz, en un paraje que los indios llamaban Airipí. A los pocos días del establecimiento, llegó por tierra a la misión el padre Clemente Guillén, quien abrió el primer camino terrestre entre las misiones de Loreto y La Paz, lo que mucho ayudó a consolidar esta naciente misión”. Como se puede percibir, tanto Mathes como Lazcano coinciden en la misma fecha sobre la fundación de esta misión.

El profesor e historiador Leonardo Reyes Silva nos deja la siguiente información en su libro Tres hombres ilustres de Sudcalifornia, sobre la fundación de la misión en comento: Del establecimiento de la misión de La Paz en 1720 existen tres valiosos documentos escritos por los padres Jaime Bravo, Juan de Ugarte y Clemente Guillén rescatados por el doctor Miguel León Portilla, mismos que aparecieron en un libro editado por el gobierno de Baja California Sur en el año de 1989 con el título de “Testimonios sudcalifornianos”. En la introducción, el doctor León-Portilla dice: El padre Juan de Ugarte, que ejercía por ese tiempo el cargo de visitador, encomendó la empresa al recién ordenado sacerdote, pero ya veterano en estas misiones, padre Jaime Bravo. Salieron así ambos del puerto de Loreto el 1º de noviembre de 1720, estrenando la balandra construida en la península, “El Triunfo de la Santa Cruz”. En sólo dos días y medio llegaron a la gran bahía. El 3 de noviembre desembarcaron y al día siguiente, sin concederse reposo alguno, levantadas las primeras barracas, formalmente quedó fundada la Misión de Nuestra Señora del Pilar de La Paz.

El profesor e historiador Jaime Holmos Montaño relata en su libro Apuntes cronológicos de Baja California Sur y los Cabos esta información: Noviembre 4 Se funda en La Paz, la Misión Nuestra Señora del Pilar de La Paz, Airapí, por los padres Juan de Ugarte y Jaime Bravo, este último duró ocho años al frente de la Misión ya que fue llamado a Loreto para que ayudase al padre Píccolo, debido a que estaba muy viejo y enfermo.

El emérito profesor e historiador Gilberto Ibarra Rivera en su libro La Paz, ciudad y puerto mexicano. Origen, proceso histórico y símbolos emblemáticos, comenta lo siguiente sobre este asunto: Después de la fundación de Loreto hubo de pasar dos décadas y tres años para que fuese posible el avance de los jesuitas hacia el sur y lograr, al término de ese tiempo, la fundación de la Misión de La Paz, lo que sucedió hasta el 3 de noviembre de 1720, con la advocación a Nuestra Señora del Pilar de La Paz, patrona del puerto, establecida entre los callejúes, una rama del grupo guaycura.

Ahora bien, toca el momento de analizar fuentes primarias de la historia, los escritos de los jesuitas que participaron en este evento multicitado. Afortunadamente, los tres sacerdotes que tuvieron el papel protagónico en esta aventura de fundar la Misión de Nuestra Señora del Pilar de La Paz escribieron relaciones en donde contaban cómo se llevó a cabo este suceso.

El padre Juan de Ugarte narra este acontecimiento en la Carta del padre visitador Juan de Ugarte al excelentísimo señor Marqués de Valero, Virrey. Fundación de la misión de Nuestra Señora del Pilar, en el puerto de La Paz. Marzo 15 de 1721. En este documento no se consignan fechas y simplemente es un relato general de lo que realizaron los sacerdotes desde el día que partieron de Loreto hasta el mes de marzo de 1721.

El padre Clemente Guillén también dejó una relación la cual se titula Expedición por tierra desde la Misión de San Juan Malibat a la Misión de La Paz en el seno Califórnico, año 1720, por el padre Clemente Guillén y aunque es un documento muy detallado en fecha y sucesos es de poca ayuda para establecer la fecha de la fundación de la misión ya que cuando él arriba a La Paz, el 6 de diciembre, es muy probable que la misión ya estuviera fundada.

Finalmente, el sacerdote Jaime Bravo nos ofrece la relación más completa y al parecer es en la que se han basado todos los historiadores del siglo XX para concluir las fechas en que probablemente se funda la Misión de La Paz. El documento del sacerdote Bravo se titula ¿Razón de la entrada al puerto de La Paz: conquista de la Nación guaycura y fundación de la Misión de Nuestra Señora del Pilar en California, año de 1720, por el padre Jaime Bravo. En el mencionado documento el ignaciano comenta que efectivamente, en la tarde del día 3 de noviembre de 1720 llegaron al puerto de La Paz y que a partir de ese día hasta el 6, se dedicaron a desmontar un terreno cercano a la playa, sin embargo también precisa que encontraron un paraje muy a propósito para fundar la Misión, arriba de una loma. Los demás días los dedican a construir algunas barracas y almacén así como para realizar exploraciones a lugares cercanos por tierra y visitando las islas Cerralvo, San José y Espíritu Santo en busca de naturales que acudieran para ser catequizados.

El sacerdote Bravo menciona que, al mismo tiempo que una parte de sus hombres van a explorar, otra parte empieza a desmontar la “loma alta que habían encontrado” y finalmente concluye lo siguiente: Al mismo tiempo que llegó la canoa, estábamos mudando todo el tren de barracas y demás cosas a la loma que se había despejado. Y todo quedó en ese día compuesto, y en el siguiente día del glorioso Apóstol de las Indias, San Xavier, armadas las tres barracas dentro de una trinchera de estantería de mezquites, con su plaza de armas y a los alrededores sus casillas que hizo la gente de mar, cocina, y corral, todo junto dominando toda la bahía, palmar y dilatados llanos, con admirable vista.

Este mismo día, después de las misas, se enarboló el estandarte de nuestra redención, la Santa Cruz, hecha de dos palmas muy derechas y fuertes, y la principal quedó de once varas de alto, con lo que le corresponde de brazos, hechura de un buen carpintero, y con aparejos reales y cabrias, en que son Inteligentes los marineros, se plantó en un hoyo de estado de hondo, y como está en alto y despejado, se ve desde muchas leguas a la mar.

El día en que se celebra al “glorioso Apóstol de las Indias, San Xavier” es el día 3 de diciembre, por lo que es muy probable que todos los actos que relata Bravo que se llevaron a cabo ese día, hayan hecho concluir al Dr. W. M. Mathes, que no fue el 3 de noviembre, sino el 3 de diciembre de 1720, el día en que “formalmente” se fundó la Misión de Nuestra Señora del Pilar de La Paz Airapí.

Aquí abro un paréntesis para aclarar lo siguiente. En diversos sitios de Internet y documentos que circulan dentro y fuera de nuestro Estado, se dice que la actual Catedral de la Ciudad de La Paz (ubicada en la calle Revolución de 1910 entre Independencia y 5 de mayo) corresponde al templo de la “Misión” que fundó Jaime Bravo y Juan de Ugarte en 1720. Esto es totalmente falso. Este templo, el que ahora vemos en el centro histórico de la ciudad, inició su construcción en el año de 1861 y en su fase primaria se culminó cuatro años después. El sitio donde se erigió tampoco es el lugar donde se cree que estuvo la Misión de Nuestra Señora del Pilar. De todo esto hay constancia en el Archivo Histórico de Baja California Sur “Pablo L. Martínez”.

Como conclusión general podemos decir que, de acuerdo a los documentos que se conocen en la actualidad sobre los sucesos que ocurrieron en las fechas en que llegaron a este puerto de La Paz los sacerdotes Bravo, Ugarte y Guillén, no definen explícitamente una fecha específica para decretar la fundación de la misión del sitio, tal como sí aparece, por ejemplo, en la fundación de la Misión de Nuestra Señora de Loreto. A la mejor conclusión que podemos llegar es que fue el día 3 de noviembre (no el 4, como asegura Pablo L. Martínez) la fecha de la llegada del contingente de colonos que venían a fundar una Misión en este puerto de La Paz.

Bibliografía:

Pablo L. Martínez. “Historia de la Baja California”

Dr. Michael W. Mathes. “Las Misiones de Baja California  1683 – 1849”

Carlos Lazcano Sahagún. “Misiones de las Californias X: Nuestra Señora del Pilar de La Paz Airipí”

Leonardo Reyes Silva. “3 hombres ilustres de sudcalifornia”

Jaime Holmos Montaño. “Apuntes cronológicos de Baja California Sur y los Cabos”

Gilberto Ibarra Rivera. “La Paz, ciudad y puerto mexicano. Origen, proceso histórico y símbolos emblemáticos”

Juan de Ugarte. “Carta del padre visitador Juan de Ugarte al excelentísimo seño Marqués de Valero, Virrey. Fundación de la misión de Nuestra Señora del Pilar, en el puerto de La Paz. Marzo 15 de 1721”.

Clemente Guillén. “Expedición por tierra desde la Misión de San Juan Malibat a la Misión de La Paz en el seno Califórnico, año 1720, por el padre Clemente Guillén”

Jaime Bravo. “Razón de la entrada al puerto de La Paz: conquista de la Nación guaycura y fundación de la Misión de Nuestra Señora del Pilar en California, año de 1720, por el padre Jaime Bravo”.

__

AVISO: CULCO BCS no se hace responsable de las opiniones de los colaboradores, esto es responsabilidad de cada autor; confiamos en sus argumentos y el tratamiento de la información, sin embargo, no necesariamente coinciden con los puntos de vista de esta revista digital.




Monumentos de La Paz: la Historia en cantera. Entrevista con Cuauhtémoc Murillo

FOTO: Modesto Peralta Delgado.

El Beso de la Mujer Araña

Por Modesto Peralta Delgado

 

La Paz, Baja California Sur (BCS). Aunque no hablan, las estatuas dicen mucho de su ciudad. Hablan de su historia y de su cultura. Desde su quietud y su silencio, están llenas de contenido, y pasan de ser meras representaciones de piedra a compañeras mudas del paso del tiempo. Por supuesto, La Paz posee muchísimos monumentos —alrededor de 50—, y para abordar ampliamente el tema entrevistamos a Juan Cuauhtémoc Murillo Hernández, autor de De la memoria al olvido. Monumentos de La Paz, Baja California Sur.

Tras dos años de investigación —cuando estuvo en Comunicación Social del Ayuntamiento de La Paz—, Murillo Hernández logró compilar valiosa información de los monumentos de esta capital. ¿Cuál sería el más representativo y cuál el más cuidado? ¿Qué opina de erigirle una estatua a Hernán Cortés en La Paz y de rayonear o destruir esculturas por protestas sociales? En exclusiva para CULCO BCS, publicamos la entrevista que tuvimos con el autor sobre éste y otros temas relacionados con las piedras convertidas en inmortales figuras sobre las calles de La Paz.

FOTO: Cortesía.

También te podría interesar: Guillermina Sáenz, enamorada del escenario desde hace 33 años

Luego de tu experiencia al publicar “De la memoria al olvido…” explícanos, ¿quiénes y cómo se determina qué monumento erigir? ¿Quiénes tienen la calidad jurídica o moral de establecerlo? Para instalar un monumento o una escultura en un lugar público, en el caso del municipio de La Paz, cualquier persona, organización o institución puede presentar la solicitud. Con el paso del tiempo está solicitud se ha venido definiendo ya que en el pasado, prácticamente, eran monumentos oficiales promovidos por el gobierno del (entonces) Territorio o del Gobierno del Estado. Para este trámite, se debe solicitar autorización al Ayuntamiento, el cual, a su vez, debe turnar el asunto a la Comisión de Nomenclaturas Oficiales a efecto de que emita un dictamen que puede contemplar la opinión de los promoventes, del cronista municipal como cualquier persona o institución que pueda aportar elementos que ayuden a la toma de decisión de la Comisión. Con ello, la Comisión presenta al Cabildo su dictamen con el propósito de que lo analice, discuta y, en su caso, lo apruebe o rechace.

Sin embargo, de acuerdo a los antecedentes de algunos monumentos o esculturas en los últimos 50 años —incluso, recientes—, en algunos casos no existen documentos que comprueben que el Ayuntamiento haya autorizado expresamente la instalación. Ejemplo de ello están, por ejemplo, el monumento a los Niños Héroes y el de las esculturas del malecón a principios de la década del 2000, de los que no se han encontrado en sus expedientes tales autorizaciones.

De las estatuas que consignas en tu libro, ¿cuál historia te parece más interesante, y si es que lo hubiera, cuál sería tu favorita? De los 50 monumentos y esculturas que registré en mi investigación todas tiene procesos interesantes, ya sea por el motivo mismo, su instalación o por los artistas que intervinieron para su creación. En lo personal, tres me atraen más: el primero, es el monumento-escultura El Camino Real, creación del arquitecto y artista visual Eduardo Rojas Monedero, a solicitud de la empresa Decope cuando se construyó el fraccionamiento con el mismo nombre en el 2004-2005. Esta obra combina diversos elementos materiales naturales y visuales de lo que fue el camino real que siguieron los jesuitas tras su llegada y exploración de nuestra península.

Por otra parte, está el monumento a los Niños Héroes, construido en 1973, con motivo del 150 aniversario de creación del Heroico Colegio Militar y en una serie de actividades que se realizaron en ese tiempo en todo el país. Una de los valores de esta obra es el trabajo manual de Carlos González  Cázarez, un cantero jalisciense que llegó a nuestro Estado en los años 50 del siglo pasado y que creó una familia de canteros con obras en varias partes de la entidad. El valor artístico de este monumento salta a la vista y se puede apreciar con mucho detalle, a pesar de la altura del monumento.

Y el otro es, más bien, una serie de esculturas hechas por el escultor Juan Fernando Olaguibel quien, entre muchas otras esculturas, es el autor de la Diana Cazadora y el monumento a la Expropiación Petrolera, de la Ciudad de México. En Baja California Sur contamos con varias de este artista, como los bustos de Juárez, en la Plaza de la Reforma, el de Márquez de León, en el Teatro de Todos Santos, y las esculturas de Juan Domínguez Cota, en La Purísima y San Isidro, entre otros. Un gran artista mexicano del siglo XX tiene obra en nuestro estado, lo que debe ser un signo de distinción para nosotros.

Sobre los monumentos que hay en La Paz ¿cuál es el más antiguo; el más abandonado; el más cuidado; el más caro; cuál el más emblemático de la ciudad? De los monumentos que existen en la ciudad, en espacios públicos, el más antiguo es el monumento a Morelos, frente a la secundaria Morelos y que antes estaba en una glorieta en el cruce de las calles 5 de Mayo y Primo Verdad, el cual data de 1939 y fue encargado al escultor Guillermo Ruiz, también un extraordinario artista del siglo XX mexicano pues, entre otras obras, es autor del monumento espectacular de Morelos de la isla de Janitzio, en Michoacán, y quien dirigió la Escuela de la Esmeralda, cuna de importantes artistas mexicanos. Entre lo que se han conservado mejor están el de los Niños Héroes porque, prácticamente, está a cargo de la Tercera Zona Militar, la que le da un mantenimiento permanentemente.

Entre los dañados, desafortunadamente, existe varios: el de Allende, en el parque junto al mercado Olachea, fue destruido hace pocos años y no se ha repuesto; el de la Madre ha sufrido diversos daños, como la pérdida de diversas partes del monumento; se perdió hace poco tiempo la placa original del monumento del muelle de la reina, en la explanada principal del malecón; la escultura El Ancla, ubicado en el maleón cerca del balneario El Coromuel, ya no cuenta con el ancla, una pieza monumental que resulta muy extraña su pérdida, debido al peso de la misma.

Sobre los costos, el monumento a los Niños Héroes, en 1973, costó 196 mil pesos; la escultura de Costeau costó 173 mil pesos, en 2011; la de los tiburones martillo, en 2011, 538 mil pesos; y La Perla, en 2014, 1.2 millones de pesos. En cuanto a el más emblemático, en mi opinión, es el que los paceños hemos hecho nuestro con el paso del tiempo, como es el de la Cola de la Ballena el cual, originalmente, tiene como nombre La Puerta de La Paz porque iba a instalarse en un punto más cercano al aeropuerto, sobre la misma carretera, cuyo arco iba a cubrir la carretera; pero que diversos factores llevaron a cambiarlo de lugar y modificarlo parcialmente para conocerlo como está en la actualidad.

FOTO: Modesto Peralta Delgado.

 A tu juicio, ¿qué personaje histórico o tema debería contar con una estatua o nombre de alguna plaza en La Paz?

El hecho de que los paceños en particular, y los sudcalifornianos, en general, hagamos reconocimientos públicos a personas, organizaciones o instituciones, debe ser normal; es decir, hacerlo más frecuentemente, porque significaría que nuestra vida, nuestro quehacer cotidiano tiene elementos positivos y que valen la pena recordarse. Creo que hay muchos casos para ello, pero, en mi opinión, los cambios partidistas en el gobierno de las últimas dos décadas ha llevado a ocultar buena parte de nuestro pasado por cuestiones políticas e ideológicas. Es decir, parecería que, de 1999 a la actualidad no hay antecedentes históricos valiosos qué rescatar o que todos nacimos del 99 en adelante. Esta actitud ha dañado nuestra memoria, nuestra idiosincrasia y, creo, ha facilitado la desunión entre la sociedad sudcaliforniana. Los monumentos crean cohesión social, identidad colectiva y un orgullo para todas las generaciones hacia el futuro.

FOTO: Cortesía.

Además, no está mal, de ninguna manera, que un partido nuevo en el gobierno crea conveniente impulsar a sus propios héroes o hacer los reconocimientos que estime conveniente. Si el PAN quiere hacerlos, que los haga, como los ha hecho en otras entidades como Nuevo león o Sinaloa, por ejemplo; o que MORENA también tenga sus propios guías históricos. Todos ellos, al final de cuentas, también forman parte de nuestra historia. En el caso de nuestro Estado, hay maestros, médicos, dirigentes sociales en pequeñas comunidades, artistas y muchos más que han aportado mucho a la construcción de la actual Sudcalifornia.

De la memoria al olvido… de Juan Cuauhtémoc Murillo —quien nació en Los Mochis en 1966, con varios años de radicar en esta ciudad— fue publicado en 2015 con apoyos de los gobiernos de la Federación, de Gobierno del Estado y del XIV Ayuntamiento de La Paz. Es único en su materia en el Estado, contando con amplias fotografías a color, y en algunos casos, entrevistas con escultores que dejaron su firma en las piedras y calles de la ciudad. Cabe destacar que el autor cuenta con licenciatura y maestría en Historia, con otros títulos publicados, así como haber ocupado un tiempo la presidencia de Escritores Sudcalifornianos, A. C.

Debido a cómo la tradición y el discurso oficial le refiere la fundación de La Paz, ¿qué opinarías de realizarle una estatua de Hernán Cortés en el Puerto de Ilusión? Un ejemplo de lo anterior es el reconocimiento o revaloración de Hernán Cortés. Sin duda alguna un personaje de la historia de México complejo y contradictorio, pero es parte de nuestra historia. El problema ha sido ideológico por el cual no se le ha querido reconocer su participación en la construcción de nuestra historia. En lo que hace a Baja California Sur, debiera tener cuando menos una escultura o una calle. Su figura ha trascendido y no estaría mal contar con un reconocimiento más allá, reitero, de una confrontación ideológica.

¿Qué opinas de que estatuas locales (como el de La Paloma en el malecón, por poner un ejemplo) sea blanco de activismo y protesta y sean “tomadas” o rayoneadas? Las esculturas y los monumentos son bienes públicos; es decir, son de toda la comunidad paceña, como las calles, los parques o el alumbrado público, por ejemplo. Es decir, son bienes que contribuyen a la buena marcha de la ciudad y, por lo tanto, debemos cuidarlos. Si personalmente no estamos de acuerdo con la obra de una escultura o un monumento, hay canales para expresar dicha inconformidad o desacuerdo. Pero, de ninguna manera, dañarlos es opción, nadie tiene derecho a dañarlas por mayor que sea su inconformidad. Porque, por decir un caso, si alguien está inconforme con un acontecimiento social, ¿por qué en lugar de maltratar una escultura o un monumento, mejor pintarrajea la fachada de su casa o maltrata el portón de su casa o incendia su vehículo?, por decir casos extremos como lo son los actos vandálicos a bienes públicos.

FOTOS publicadas en BCS Noticias y El Sudcaliforniano.

Sobre el mismo tema, ¿cómo ves que se han tumbado estatuas de Cristóbal Colón, entre el de otros personajes históricos, a raíz de la muerte del afroamericano George Floy? El tema de la destrucción de estatuas o esculturas en otras partes del mundo o de nuestro país tiene que ver más esa falta de cohesión social que actualmente se vive. Nos encontramos divididos ante la interpretación de la historia y es más fácil actuar en contra de un bien material que entender el proceso histórico que hemos vivido. Lo mismo se han derribado esculturas de Colón en el mundo (como han querido derrumbar la del paseo de la Reforma, en la ciudad de México), como de Lenin, Stalin, Mao Tse Tung; o como placas con el nombre de Gustavo Díaz Ordaz en el metro de la Ciudad de México, por ejemplo. Si intentáramos ver contradicciones en personajes históricos, sería un cuento de nunca acabar, pero ¿quién ha querido derrumbar una escultura de Villa, de Zapata, de Washington, Lincoln o De Gaulle? Por eso, conocer nuestra historia nos debe llevar a evitar cometer los mismos errores, entender a cada quien en su momento histórico y no ver a Hidalgo, por ejemplo, como si viviera en el 2020.

__

AVISO: CULCO BCS no se hace responsable de las opiniones de los colaboradores, esto es responsabilidad de cada autor; confiamos en sus argumentos y el tratamiento de la información, sin embargo, no necesariamente coinciden con los puntos de vista de esta revista digital.




Unión de Padres por la Alergia Alimentaria en Baja California Sur (II)

FOTO: Internet.

Mamá Científica

Por Marián Camacho

 

La Paz, Baja California Sur (BCS). En la entrega anterior de esta entrevista a la Lic. Martha Erika Salvatierra, fundadora de la Unión de Padres por la Alergia Alimentaria (UPAL) en Baja California Sur, pudimos conocer el inicio de la historia de su hijo Óscar y la primera parte del camino que la llevó a formar parte de esta organización, sin fines de lucro, constituida por madres y padres con el objetivo de brindar apoyo e información acerca de las alergias a los alimentos de sus hijos.

Por si usted aún no ha leído la primera parte de esta vibrante entrevista, hacemos de su conocimiento que las alergias alimentarias son afecciones, potencialmente mortales, que afectan a millones de personas alrededor del mundo y que tienen una prevalencia en aumento. En este sentido, UPAL se concentra en la misión de difundir la existencia de las alergias alimentarias para fomentar la conciencia pública, y en proveer de información y recursos para el mejor manejo de las alergias alimentarias dentro y fuera de los hogares de las familias afectadas, promoviendo ambientes seguros y de respeto para las personas que padecen alguna alergia alimentaria.

También te podría interesar: Unión de Padres por la Alergia Alimentaria en Baja California Sur (I)

Continuando con la entrevista, Erika me platicó que, cuando regresó a Baja California Sur, después de obtener un diagnóstico de alergia alimentaria múltiple para su hijo en la Ciudad de México, sintió que Ahora sí estaba sola. Porque aquí en La Paz, y en todo el estado, no había los especialistas que requieren nuestros niños con alergias alimentarias. Me refiero a alergólogos inmunólogos pediatras o gastroenterólogos pediatras. Así, lo primero que hice fue buscar un pediatra que me pudiera apoyar para dar seguimiento al tratamiento de Óscar. Sin embargo, me encontré con que, al decirles a los pediatras que visité que mi hijo tenía alergias alimentarias, ellos me respondían sorprendidos “y, ¿qué es eso?”. Cada vez que eso sucedía, la sorprendida era yo porque, en pocas palabras, me decían que no sabían qué era y no sabían cómo lo iban a manejar. Entonces yo pensaba “pero, si son pediatras, ¿cómo no van a saber?”. Esa fue la primera dificultad con la que me topé cuando regresé. Después, me di cuenta de que, en La Paz, tampoco había ningún tipo de alimento certificado, seguro o apto para pacientes con alergia alimentaria. Me refiero obvio a alimentos procesados o empaquetados, porque alimentos naturales claro que había.

Así, a mi regreso, sin los médicos ni los alimentos necesarios, me volví a sentir totalmente sola. Óscar comenzó a recaer y a volver a urgencias. En el hospital yo les mencionaba a los médicos que mi hijo tenía alergias alimentarias múltiples, que debíamos de revisar alimentos, medicamentos, y volví a recibir esas miradas de “y eso ¿qué es?”. Nadie sabía nada. Fue cuando me empecé a dar cuenta de que, si yo no me preparaba, de que, si yo no aprendía para conocer más sobre el tema, nadie más me iba a poder ayudar. Fue cuando en una ocasión que Óscar volvió a recaer, al regresar de un fin de semana muy largo en hospitales, otra vez, porque de loca y exageraba no me bajaban (me decían que la alergia alimentaria no existía), mandé un mensaje al grupo de Alergia Alimentaria México diciendo “ustedes me apoyaron, de ustedes estoy aprendiendo y me doy cuenta de que, aquí en mi ciudad y en mi estado, estoy prácticamente sola. Estoy segura de que hay más casos como Óscar, pero no se sabe y por eso no nos toman en cuenta.  No tenemos apoyo, sobre todo de equipo médico que nos avale, ya que yo solo tengo un expediente y un papelito, pero no tengo a un médico que me apoye”. Ahí fue cuando Paola me dijo “adelante Erika, si te sumas al equipo, te apoyamos. Ya no estás sola”.

Por primera vez, me sentí fuerte y apoyada en mi ciudad por dos o tres mamás que en aquellos entonces trabajaban con el puro corazón en el grupo, porque en esto no hay sueldo. En esto no hay nada más que la recompensa de que puedes apoyarte mutuamente y de que vas a ayudarle a otra familia que necesita información, la cual considero que es la herramienta más poderosa que tenemos después de recibir un diagnóstico por un profesional. Se podría decir que ahí, hace nueve años, fue cuando nació UPAL BCS, porque empecé a trabajar desde la primera noche que me puse en contacto con las chicas de UPAL México, y fue cuando a Paola me dijo “Adelante, Coordinadora en Baja California Sur.  

Empecé a trabajar solita. Comencé a acercarme a los pediatras tomando de la mano el caso de Óscar para que me escucharan. Sin embargo, se me cerraron muchas puertas. No ha sido fácil, pero ha valido mucho la pena. Cuando seguíamos con la dificultad de que en La Paz no había médicos especialistas en el tema, Óscar y yo seguimos viajando a la Ciudad de México para su revisiones. En cada visita, hablaba sobre las dificultades que teníamos en Baja California Sur e invitaba a los médicos alergólogos y gastroenterólogos pediatras a que, por favor, viniera a nuestro estado donde los necesitábamos. Así, en uno de mis últimos viajes, un médico me dijo “Erika te tengo muy buenas noticias. Ya vas a tener en La Paz una doctora que es gastroenteróloga pediatra. Se llama Luz María González. De hecho, ya debe estar por allá y ahorita mismo te voy a ayudar para que la contactes.

“Cuando regresé a La Paz, Óscar comenzó a ser paciente de la Dra. González. A ella le agradezco mucho su apoyo en los inicios de UPAL BCS porque fue el empuje que necesitamos para que nos tomaran en cuenta, ya que no era lo mismo andar como una mamá tocando puertas a estar acompañada de una especialista. Fue en ese tiempo cuando nos animamos, en conjunto con ella, a hacer la primera reunión UPAL BCS en La Paz. Además, acompañados de la Dra. Luz María, hacíamos pláticas para padres y madres que acababan de recibir su diagnóstico. Empecé a realizar folletos del grupo para darnos a conocer. Visitaba consultorios, laboratorios, guarderías y todo aquel lugar donde pudiera dejar un folleto para que toda familia supiera del tema por varias razones: por si llegaban a tener un diagnóstico de este tipo; porque la mejor herramienta para proteger a los niños alérgicos es que la sociedad esté informada; y porque yo tenía una gran necesidad de encontrar más familias como la mía. Sin embargo, sobre todos estos motivos, mi mayor motivación era que yo no quería que más niños sufrieran tanto como Óscar, porque si un pediatra hubiera tenido conocimiento sobre el tema, Óscar no hubiera tenido tres años de maltrato médico, como llamo yo a la forma en que trataron a mi hijo. Con un diagnóstico correcto y oportuno, Óscar no hubiera vivido en urgencias y no hubiera tenido tantas consecuencias. Así que me planteé como meta personal que no habría ningún Óscar más en Baja California Sur. Me propuse trabajar para que no hubiera más diagnósticos tardíos, porque todos los niños tienen que ser diagnosticados, mínimamente, cuando son lactantes porque esto es muy importante para su futura calidad de vida. Es fundamental para que tengan la oportunidad de ser ex alérgicos, porque sí se puede. Sin embargo, niños como a Óscar, quien pasó tres años en la búsqueda de un nombre a su padecimiento y recibió un diagnóstico tardío, han perdido esa oportunidad.”

Cuando UPAL BCS empezó a trabajar regularmente, toqué puertas, con éxito, en radio y programas de televisión. Me acerqué al Colegio de Pediatría para informarles que existíamos y para entregarles folletos para que, si les llega otra familia como la mía, les pudieran decir que aquí estábamos, que no estaban solos. Quería que a esas familias no las hicieran sentir mal, como pasó con la nuestra, quería que supieran que la alergia alimentaria si existía y que no sólo el diagnóstico es el que hacía la diferencia, sino el cómo manejarla. Porque una cosa es el nombre del padecimiento y otra cosa es el trabajo que hay en casa, el cual yo siempre he dicho que es un trabajo en equipo, porque primero están los especialistas que diagnostican, pero el trabajo duro lo llevan las familias y nadie va a entender mejor ese trabajo que sus propios miembros.

En la primera reunión de UPAL BCS fuimos exactamente 10 familias. Después empecé a hacer reuniones mensuales y, paulatinamente, fue aumentando el número de familias asistentes. En un inicio, con apoyo de la gastroenteróloga pediatra Luz María, hubo bastantes diagnósticos y el grupo creció. Lamentablemente, la médico se fue de la ciudad y nos enfrentamos, de nuevo, a un periodo sin especialistas y, por ende, sin nuevos diagnósticos, lo cual, de ninguna manera, quería decir que no había niños alérgicos. Al contrario, en ese momento sentí que teníamos que trabajar más, porque teníamos que llegar a esas familias sin médico, porque el tiempo es muy importante y porque a nuestros niños sudcalifornianos no se les podía volver a negar un diagnóstico oportuno.

Seguí viajando a la Ciudad de México y haciendo difusión para invitar especialistas. Hasta que, después de años de estar sola en la radio y televisión estatales y en reuniones de padres, logré contactarme, en la Ciudad de México, con la Dra. Luz María y me dijo “Erika, te tengo muy buenas noticias. El Dr. Dino Pietro Paolo, alergólogo pediátrico, se mudará a Cabo San Lucas.”. Así que, en lugar de viajar a la Ciudad de México, el transportarme de La Paz a Cabo, obvio que para mí era la gloria. Cuando regresé a Baja California Sur, me contacté inmediatamente con el doctor para seguir trabajando con el grupo. La verdad, desde el primer momento, tuve muchísimo apoyo de su parte. Reiniciamos las reuniones, dimos conferencias, visité familias de recién diagnóstico y pequeñas tiendas locales para invitarlos a manejar productos aptos. A cada lugar que llegó siempre platico del grupo y, donde me lo permiten, entrego folletos. Antes no había un comercio que manejara un alimento empaquetado, por más sencillo que fuera como un paquetito de galletas, que fueran aptas. Entonces, en cada lugarcito que entraba, parecía merolico, diciendo “oiga, mire mi hijo padece esto, represento a tal grupo, existen este tipo de productos y ojalá algún día los tomara en cuenta para manejarlos”.

Las reuniones de padres las realizábamos antes en una farmacia especializada donde había un pequeño un pequeño centro de convenciones que nos prestaban. Ahí empecé a realizar reuniones mensuales únicamente con las madres y padres; después invité a especialistas, por ejemplo, invitamos al Dr. Dino Pietro Paolo para una plática sobre alergias a alimentos, después médicos otorrinos, nutriólogos, etc. Esto nos ha permitido informar y acercar a los especialistas a los padres. En este sentido, tenemos realmente poco tiempo de contar con especialistas en Baja California Sur. El Dr. Dino Prieto Paolo va a cumplir cinco años en Cabo San Lucas, después de llegó el Dr. Fireth Pozo, también alergólogo pediatra, aquí a La Paz. Actualmente tenemos tres especialistas en el estado, dos están en Cabo San Lucas y uno está aquí en la capital. También contamos ya con un gastroenterólogo pediatra. Poco a poquito vamos mejorando, pero hace falta muchísima información. Entonces seguiré trabajando. Siempre lo he dicho, no puedes permitirte tener información y quedártela sin compartirla. No quiero ningún Óscar más. No quiero que ninguna otra familia y ningún otro niño sufra lo que Óscar sufrió, ni tampoco que nos vean como bichos raros. No me parece justo que porque no teníamos especialistas no nos creyeran, sobre todo por aquellas personas que no tenían la facilidad de buscar especialistas fuera de la ciudad.

Amo el grupo de UPAL BCS, podría platicarte de él horas y horas. Creo que me fui de largo, ¿verdad? Me hiciste remover muchas cosas. Ver a Óscar ya de 13 años y comiendo tranquilo es mi mayor motor. Óscar fue diagnosticado con más de 20 alergias alimentarias y mucho daño interno. Tuvo muchos diagnósticos falsos. Fue diagnosticado, por años, con enfermedad celiaca, amibiasis, y hasta cáncer de colon. No queremos que los niños que vienen atrás sufran. No se vale este sufrimiento cuando solo es por falta de información. He tocado muchas puertas y lo seguiré haciendo. A cualquier congreso que nos invitan, hago todo lo posible por asistir y representar a nuestros niños. Me interesa mucho llegar a los pediatras, porque son los primeros que tienen acercamiento con las familias afectadas y deben saber qué pasa. Tengo folletos y mucho material, que comparto de forma voluntaria, el cual, en su mayoría, es proporcionado por la Food Allergy Anaphylaxis Network (FAAN) y por el Colegio Mexicano de Pediatras Especialistas en Inmunología Clínica y Alergología. La FAAN, mayor organización sin fines de lucro del mundo en el tema avala y certifica a UPAL como el único grupo en su tipo en México, gracias a la confianza y trabajo de años de estos años.

Aún queda mucho trabajo pendiente por parte de UPAL, el cual incluye, por supuesto, continuar con la difusión de información a las nuevas familias con hijos diagnosticados y la concientización de la sociedad sobre estos padecimientos; asimismo, la labor futura va más allá de los hogares y de la responsabilidad familiar, porque, por ejemplo, es necesario también impulsar políticas públicas para que las leyes obliguen a las empresas a declarar ingredientes alérgenos en el etiquetado de sus productos. Sin embargo, con el carácter optimista y persistente que caracteriza a Erika, concluye mencionando la confianza que tiene en obtener el apoyo de las personas e instancias encargadas de este asunto.

Esta es la motivadora historia de cómo una amorosa e inteligente madre formó un grupo de apoyo que constituye una importante fuente de información para las familias de hijos alérgicos a algún alimento en Baja California Sur. El trabajo que Erika ha realizado en estos nueve años es un gran tesoro que como madres y padres debemos valorar. En este sentido, poder contar con médicos especialistas en nuestro estado, información precisa y confiable, así como redes de apoyo como UPAL, son regalos invaluables que podemos corresponder al informarnos correctamente, al difundir este conocimiento a las nuevas familias que comienzan en este camino y, sobre todo, al ser responsables en el tratamiento de nuestros hijos que, si son diagnosticados y tratados a tiempo, pueden superar sus alergias y vivir vidas felices, tranquilas y, sobre todo, saludables.

Finalmente, si usted querido público lector, se identifica con esta experiencia o conoce a alguien que pudiera hacerlo, y quisiera obtener más información, puede comunicarse directamente con la Lic. Martha Erika Salvatierra Hirales al número celular 612 20 2 90 33 o al correo erickaoym@hotmail.com

__

AVISO: CULCO BCS no se hace responsable de las opiniones de los colaboradores, esto es responsabilidad de cada autor; confiamos en sus argumentos y el tratamiento de la información, sin embargo, no necesariamente coinciden con los puntos de vista de esta revista digital.